5 de agosto

Día 5

Después de dormir en un césped inclinado donde me escurría por la cama cada dos por tres despertamos en el campo de los Alpes y descubrimos que los extraños ruidos del día anterior eran unas vacas que pastaban cerca de la caravana detrás de una valla, (después de un rato discutiendo si la valla estaba electrificada o no Gon decidió comprobarlo........... SI que estaba electrificada jajajajajaja, se llevó un calambrazo). Desayunamos con vistas increíbles y dimos un paseo. Descubrimos una fuente cercana donde por fin nos duchamos todos (después de 4 días ya cantábamos un poco) rellenamos la caravana de agua y nos duchamos a manguerazos (Araújo con sus calzones a lo Borat y Valeria en bolas).

Ya limpitos cotinuamos nuestra marcha hasta Ginebra, una ciudad preciosa, no se si sera así siempre pero había una feria a la orilla del río con conciertos y vimos varios festivales y un chorro de agua de unos 100 m.

Nos hicimos unos sandwiches y fuimos comiendo por el camino hasta Berna, la ciudad más bonita hasta ahora con un montón de esculturas por las fachadas de las casas y en pirulos en mitad de la calle además de una catedral preciosa (en la plaza de delante se representaba "Los Miserables", y en otra plaza poco más allá encontramos un concierto de jazz). Otra cosa muy buena de Berna fueron los osos, el emblema de la ciudad. En un recinto cerrado verde y arbolado había 3 osos tirados muy cachondos. Lo malo fue que nos paramos a tomar una cerveza y nos tuvimos que marchar porque no aceptaban ni euros ni tarjeta de crédito (por lo menos conocimos a un grupo de españoles, mayores pero muy majos, les ayudamos a entenderse con el camarero y nos hicimos una foto con ellos)

Por ultimo cogimos otra vez la caravana y nos perdimos por pueblecillos camino a Zurich, dormimos entre campos de cultivo.